Pío Nono 100%

Muchas personas rechazan los zoológicos, sobre todo aquellos que buscan la preservación del medio ambiente. Sin embargo, en este lugar, prima el bienestar animal.

Texto Natalia Vega R.

El Cerro San Cristóbal, no sería lo mismo sin su zoológico. Caminando por la calle Pio Nono, se puede observar desde lejos la punta del cerro, y sentir un aire selvático. Para los vecinos de Bellavista no es inusual sentir ruidos salvajes en el amanecer, cuando algunos animales despiertan o cuando dejan el rastro de su rugido en medio de la noche.

El Zoológico del Parque Metropolitano, surgió producto de la inquietud de querer mostrar la diversidad de la fauna más de cerca, de que las personas pudiesen conocer a las diferentes especies en vivo. Y no se trataría de un proyecto simple, tenía que ser algo capaz de educar las personas que lo visitaran. Y así fue.

Actualmente el Zoológico Nacional, cuenta con más de mil animales, más de 158 especies, de las cuales hay nativas y exóticas, completando un sueño que algún día pareció imposible. Alberto Mackenna, Intendente de Santiago en 1925, convirtió ese sueño en realidad, cuando se destinaron 4,8 hectáreas del Cerro San Cristóbal para construir el zoológico actual.

Y pese a que muchos veterinarios han cuestionado las condiciones en las que se encuentran los animales en este lugar, lo cierto es que los animales cuentan con todas las medidas para que se mantengan en óptimas condiciones.

De esta manera, en el año 2003 se creó la Sección de Conducta y Bienestar animal, la que cuenta con personas especializadas en el trato de los animales y fomentan sus actividades y bienestar. Hacen lo necesario para que estos cuenten con un ambiente adecuado y verifican si se encuentran en un buen estado psicológico, que no tengan stress y se vayan adaptando rápidamente a su nuevo entorno.

Por lo general, siempre se habla de los defectos de los zoológicos, y no se destacan las virtudes. Y si se trata de admitir lo positivo, no es menor indicar que el Zoológico del Parque Metropolitano, realiza una noble labor cada cierto tiempo. Y es que diariamente este recinto adopta animales que estén en peligro de muerte, o heridos, para recuperarlos y hacerlos volver a su hábitat original.

Es en este sentido, que el Zoológico Nacional, tiene un gran compromiso con los animales, ya que están absolutamente dispuestos a ayudar a las especies en peligro de extinción o desprotegidos. Aunque el lugar no es muy grande, en este sitio tienen toda la disposición de fomentar la fauna e incentivar el amor por los animales.

na labor destacada, y que siempre intenta mejorar, ya que hay que tomar que el cuidado de los animales es muy complicado, según una de las la veterinarias del lugar, Andrea Ramírez, cada elefante come alrededor de 80 kilos de alimento, por lo que deben tenerles siempre pasto, y comprar frutas. “Y a los felinos como los tigres, hay que tenerles al menos 10 kilos de carne a diario”.

De esta manera se nota un cuidado más allá de lo necesario, ya que a muchos de los animales, se les pasan huesos o juguetes para que se entretengan, lo que además les ayuda a mantener sus dientes sanos, lo que normalmente no ocurriría en su hábitat natural, donde muchos podrían ser comidos por los grandes depredadores.

A través de los años, es que se ha habido una gran evolución, ya que los progresos alcanzados en comparación a 10 años atrás, avalan el esfuerzo por parte de los especialistas, veterinarios y voluntarios que permiten hacer de este zoológico un espacio seguro para los animales y una manera didáctica de enseñar a los niños que lo visitan.-